“Estoy aliviada y con la conciencia tranquila por la salida de Dilma Rousseff”. En entrevista con La Tercera, en septiembre pasado, la coautora del pedido de impeachment contra la mandataria brasileña, Janaína Paschoal, se refería en esos términos a la destitución de la petista. A nueve meses de ese hecho, la abogada de la Universidad de Sao Paulo admite que no pensaba que Brasil viviera una nueva crisis “tan rápido”. Frente al escándalo que hoy protagoniza el Presidente Michel Temer, es categórica: “Prefiero que salga pronto para que el país se reestructure”.

¿Cree que el caso de Temer reúne las condiciones para un impeachment? ¿Su caso es peor que el de Rousseff?
La situación de Temer no es simple. El caso indica quiebre del decoro, que puede sí dar lugar, al menos, al inicio de un proceso de impeachment, con amplia defensa, en los términos de la ley y la Constitución Federal. Por el tiempo por el cual se extendieron los delitos, la situación de Dilma era más grave. Pero nada impide que las investigaciones muestren que Temer ya practicaba delitos cuando era vicepresidente.

Usted fue una de las coautoras del pedido de impeachment contra Dilma Rousseff. ¿Ha considerado presentar una solicitud similar contra Temer?
El PT es un partido muy fuerte en Brasil. En 2015, era aún más fuerte. Cuando pedí el impeachment de Dilma, la iniciativa era impensable. Toda la prensa y las universidades están influenciadas por el PT. En resumen, nadie tenía coraje para enfrentarlos. Con respecto a Temer, la situación es muy diferente. El PT pasó a la oposición y en eso ellos y sus aliados son buenos. Además, la Orden de Abogados de Brasil ya tomó la iniciativa y, en la condición de Consejera de la Seccional de Sao Paulo, yo voté favorablemente por el impeachment de Temer.

Varios de los políticos que apoyaron el impeachment a Rousseff ahora respaldan uno contra Temer. ¿Cuál es su opinión al respecto?
Tenemos que seguir con el proceso de depuración en nuestro país y, odio decir, en América Latina. Me gustaría mucho que Temer no hubiera dado pie a todo esto. Sin embargo, todo indica que sí. Entonces, prefiero que salga pronto para que el país se reestructure. Digo eso con tristeza, porque nuestro pueblo ya sufrió mucho. Pero cada uno responde por sus actos.

Además del impeachment, otras alternativas para la salida de Temer podrían pasar por resoluciones del Supremo Tribunal Federal o el Tribunal Superior Electoral. ¿Cuál de estas vías tiene más posibilidades de sacar a Temer del cargo?
La vía de la renuncia sería la menos dolorosa. Pero hay, además, esas tres opciones que usted indica. Y nunca se puede descartar la posibilidad de que él explique todo eso. Pero cada vez es más difícil una explicación.

¿Imaginó que Brasil se vería enfrentado a una crisis similar a la de Rousseff en tan poco tiempo?
No, no pensé que sería tan rápido. Pero era consciente de que derribando al gobierno, el pacto de silencio que había entre los poderosos se rompería y la suciedad aparecería. Aunque esté sufriendo como todos los brasileños, creo que sólo es posible limpiar la suciedad que se ve. De este modo, reitero: caiga quien tenga que caer.

Si Temer deja el poder, ¿prefiere elecciones indirectas o directas?
No es una cuestión de preferencias. El artículo 81 de la Constitución Federal es muy claro. En la hipótesis de que los cargos de Presidente y Vicepresidente queden vacantes, en los dos últimos años del mandato, la elección debe efectuarse por vía indirecta. No veo sentido en modificar la Constitución Federal, ahora, en medio de una crisis, si ella ya prevé el camino. Creo que es muy importante seguir la Constitución Federal. ¡Ella es nuestra seguridad!